lunes, 12 de septiembre de 2011

Emociones equilibradas.

Las emociones no se deben de tomar como "guías" para saber qué hacer o qué decidir en algún momento, de aquí la sabiduría de "no dejes que tus emociones te ganen" o "no te dejes llevar por tus emociones".

Desde que nacemos tenemos emociones, y cuando somos pequeños las expresamos mas libremente, pero conforme vamos creciendo, por miedo a ser juzgados, criticados, o no ser aceptados aprendemos a esconder nuestras emociones y no demostrarlas al mundo exterior.

Por lo mismo que las emociones en los adultos se vuelven como sentimientos prohibidos a ser expuestos al entorno de la persona, cuando las emociones ya son publicas pueden venir con extra demostracion o intensidad.

Aunque las emociones son herramientas muy importantes tanto para la intuición como para el progreso mental de una persona porque las emociones dicen qué necesitamos (alcanzar o cambiar) en ese momento, también las emociones son muy pasionales y pueden llevarnos a tomar decisiones impulsivas o extremistas.

El YO interior hace conexiones entre el cuerpo (lo que se siente fisicamente, por ejemplo dolor de cabeza, agotamiento, dolor de espalda, ansiedad, angustia, etc) y la mente (los pensamientos negativos o recuerdos del pasado), y las conecta a sentimientos que surgen en un momento específico que estamos experimentando...........de ahí surgen las emociones. Si clasificamos bien lo anterior, las emociones son todo menos el "ahora" ya que son parte pasado (recuerdos dolorosos, tristes, euforicos,etc), parte presente (lo que nuestro cuerpo nos esta dictando o diciendo en ese momento), y parte futuro (nuestra mente nos recuerda nuestros miedos, y planea para evitar que se repitan dolores anteriores). Para tomar buenas decisiones debemos pensar y decidir en el "ahora".

Entonces aprendamos a tomar nuestras emociones como avisos de que debemos cambiar algo y tomar acción en nuestra vida para salir de una emoción si es negativa, o seguir en nuestro camino y estimular mas nuestra vida si la emoción es positiva. Por ejemplo, si algo me enfurece, debo tomar consciencia de mi emoción, pero en vez de seguir enojada, lo siguiente sería forzarme a estar en el "ahora" preguntandome a mi misma "¿Qué provocó mi enojo? ¿Qué puedo hacer para cambiar mi enojo? ¿Qué debo cambiar para no permitir la provocación de mi enojo?" De esta forma, mi emoción negativa ya no es mi guia a seguir sino un aviso en mi vida, una herramienta para poder cambiar, y un momento de aprendizaje para poder desarrollar mi espiritualidad.

Las emociones se vuelven oportunidades en nuestras vidas para tratar de mejorar, ver lo que necesitamos cambiar, y tomar acción hacia una vida mas feliz y llena de paz. Nuestras reacciones y emociones no siempre van a ser las mejores ni las mas positivas, pero lo que viene después de las emociones puede ser de mucha utilidad para nuestro progreso. Necesitamos trabajar en nuestras emociones negativas o dolorosas, saber que hay forma de salir de ciclos repetitivos de dolor o de frustracion. ¿Y cómo se sale de los ciclos repetitivos? Tomando consciencia de las emociones negativas, aceptando las emociones que surgen de nuestro interior, y aprendiendo a escucharnos a nosotros mismos. Nos escuchamos al preguntarnos ¿Qué siento? ¿Porque estoy sintiendo ésto? ¿Como lo puedo cambiar? ¿Qué quiero sentir en vez de ésto? ¿Qué necesito aprender de ésto que acabo de sentir y de vivir? Entre mas oportunidades tengamos de tener experiencias con emociones fuertes, mas herramientas podremos integrar a nuestro Ser Interior, y también tendremos mas oportunidades de conocernos mejor para aprender a mantenernos en equilibrio y poder interior (poder emocional, mental, y espiritual).

Dina Sasson

“La armonía interior es el privilegio de aquellos cuyos impulsos son tales que pueden hallar salidas constructivas más que destructivas” Bertrand Russell


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