martes, 20 de abril de 2010

Despejando Un Espacio Interno con FOCUSING

Articulo muy completo de la terapia o método FOCUSING, que hace una conexión increíble con el YO interior. Para mi es como una desentoxicación mental y emocional para dar lugar a un espacio armonico dentro de nosotros.

Gracias Hugo, muy útil y completo tu artículo. Muy agradecida por compartir tu felicidad y armonía.
Artículo compartido por Hugo de Centro Zendo Facebook. Y muchisimas gracias Lic. Marina Girolami por el artículo.


"Despejar un espacio es el primer movimiento que E. Gendlin utiliza en los seis pasos para el trabajo con focusing*.
Despejar un espacio permite colocarse en un estado de mente y cuerpo más livianos, con menos ruido y menos peso. Es una herramienta que nos ayuda a soltar por un momento lo que hemos estado llevando durante el día, una época o toda una vida.
Despejar un espacio puede asemejarse a ordenar un cuarto; nuestro espacio interno es ese lugar a ordenar. Nos permite tomar conciencia de aquellas situaciones que nos están ocupando, preocupando y/o sobrecargando. Podemos así tomar distancia con aquellos acontecimientos y darnos un respiro.
Se trata de colocar todo a un costado y hacerse espacio para sí mismo, para estar cómodo con uno y redimensionar lo que nos ocurre.
Es una manera de encontrarnos a cierta distancia con nuestros problemas: no somos nuestros problemas, no nos caemos dentro de ellos y tampoco nos deshacemos de ellos. Sólo buscamos una mejor manera para poder estar con ellos, para ser con ellos. De esta forma se produce un efecto fundamental de este paso: convocamos presencia (esa increíble capacidad de estar con lo que hay, amorosa y curiosamente, sin crítica).
Es como dar un paso atrás de lo que nos ocurre para poder observarlo, para poder sentirlo.
A veces en medio de la confusión, del dolor, de la enfermedad, del estar abrumado, esta práctica deja venir lo nuevo. La posibilidad de hacer contacto con un bienestar que estaba y está allí, oscurecido por el desorden interno, por una emoción o por un pensamiento que lo ocupaba todo. Descubrimos que estábamos tomados por algo: una tristeza que todo lo invadía como una nube negra, un enojo que no daba tregua, un dolor, un insomnio que no cesaba, o una enfermedad que nos hacía sentir que sólo éramos ella.
Poder despejar un espacio para ese bienestar, que de golpe tiene la oportunidad de pasar a primer plano y de permanecer allí, es un oasis; es un regalo del focusing.
Para aquellos que practican la meditación, despejar un espacio es muy bienvenido antes de comenzarla, dado que les permitirá ir más profundo en dicha práctica.

*El Focusing o proceso del enfoque corporal es un “dialogo hacia adentro que nos permite obtener información del más profundo, sabio ser (“el cuerpo”)”.

Dice E. Gendlin: “Piensa en el primer movimiento (despejar un espacio) como en un tiempo breve en el que te permites dejar de ser un monumento para tus molestias”.
Todo esto le da al cuerpo una pausa. Esa caja de resonancia con la que vivimos nuestra vida, tiene un descanso.
Despejar un espacio se convierte así en un umbral para seguir trabajando, pero también puede ser utilizado como una herramienta única, como un paso en sí mismo.
De mi trabajo clínico y personal, no quiero dejar de compartir que el uso de este paso no deja de depararme sorpresas:
- Recibo una persona abrumada por diversas circunstancias. La invito a despejar un espacio. Al preguntarle si quiere enfocar sobre alguno de los temas con los que ha ido tomando distancia. Ella dice: “No, lo que necesito es enfocar sobre ese lugar amplio aquí dentro”. Permanecer allí le trae calma, paz y descanso.
- Otra persona solía sentir que algunas sensaciones corporales lo tomaban y lo hacían entrar en pánico. Despejando un espacio se da cuenta que él es mucho más que eso y que esas sensaciones se hacen pequeñas y que él es un gigante que camina entre ellas.
- Otro hombre que suele tomar muchas e importantes tareas sobre sus hombros, descubrió que al finalizar su día, despejar un espacio le permite regresar a su casa con otro humor.
- Despejo un espacio con una persona enferma y muy identificada con su enfermedad. Abre los ojos, me mira y me dice: “soy mucho más que esto que me ocurre, soy una persona”.
- Una mujer consulta porque a pesar de sentir que tiene muchos logros en su vida, hay allí un desasosiego, una cierta incomodidad. Despejando un espacio, logra hacer contacto con algo no escuchado: “su deseo de ser madre”. Cuando esto es reconocido, su espacio interno se vuelve pleno y su vientre ocupa mucho más espacio.

Estos son sólo algunos ejemplos…hagan la prueba…despejen su espacio interno…."

Lic. Marina Girolami (Psicóloga- FOT)


Nota: Este artículo se acompaña de un archivo de voz con el acompañamiento necesario para hacer este paso de Focusing.
(Comunicarse con Hugo en la pagina, Centro Zendo Facebook l, si están interesados, ya que no se puede aquí)
blog comments powered by Disqus