Cada célula de nuestro cuerpo es un contenedor de energía que vibra a una determinada frecuencia. Esa frecuencia atrae vibraciones de frecuencias similares que están alrededor del cuerpo constantemente. Todo lo que vemos y conocemos contiene y es energía, y esta en movimiento, esa es la vibración. Así que como nosotros vibramos con energía a ciertas frecuencias, igual lo hace todo a nuestro alrededor, objetos, plantas, animales, pensamientos, emociones, etc.
La vibración a nivel spiritual es la conexión que tenemos con la luz, paz, y armonía Divina o Universal en que nos encontramos en cada momento de nuestra existencia. La vibración también se ve afectada por nuestras emociones, nuestros pensamientos, y la salud o estado de nuestro cuerpo, pero también por otras cosas interesantes como la dieta que tengamos, el estrés que vivamos, y la falta de tiempo para conectarnos con nosotros mismos, y falta de actividad y ejercicio.
Una persona sana, alegre, tranquila, o positiva tiene una vibración mas armoniosa con frecuencias altas mientras que personas que batallan con tristeza, depresión, enojo, angustias, etc, tienen vibraciones exaltadas con frecuencias bajas.
Cuando una persona vive momentos o emociones difíciles, al recordar constantemente esa experiencia hace que su vibración se mantenga agitada con frecuencia baja y negativa, provocando picos de vibración inestable y provoca un círculo vicioso de patrones negativos entorno a su vida, por sentimientos y pensamientos que se repiten y se reviven constantemente atrayendo cosas con la misma frecuencia negativa hacia su vida.
Uno de los retos mas difíciles a los que nos enfrentamos es el de lograr vivir a frecuencia vibratorias altas pero armoniosas, ya que muchas situaciones nos enganchan a vibraciones negativas o mas bajas, por ejemplo, valores o hábitos negativos de la familia, traumas de experiencias pasadas, expectativas demasiado altas que nos ponemos, criticas auto-destructivas que aprendimos de chicos, y hay muchas mas. Otro reto difícil es el de mantenernos en una vibración alta armoniosa y constante, media vez logramos elevar nuestra vibración.
¿Cómo podemos lograr elevar nuestra vibración y que no provoque picos ? Silenciando muestras mentes. Al lograr y mantener un silencio sano dentro de nuestras mentes, dejamos de revivir, llorar, señalar, acusar, o excusar nuestras experiencias y emociones conectadas al pasado. ¿Por qué? Porque en el silencio ya no hay espacio para nada mas. Ojo, que silencio no significa vacío. Silencio significa fluir con la energía del momento, significa paz interior, y también armonía integral.
La meditación es una herramienta muy valiosa para silenciar nuestro interior ya que a través de ella nos deshacemos de basura emocional y mental. Cualquier tipo de meditación, aun la mas corta en tiempo, nos acerca a la experiencia de silencio, y esto mismo eleva nuestra vibración por ese momento. Nuestra responsabilidad y compromiso debe ser el seguir meditando para ir elevando constantemente la vibración, y también el mantenernos en armonía y paz en el tiempo entre meditaciones.
Cuando nos preocupamos y tenemos pensamientos negativos repetitivos nos conectamos a la tierra permitiendo que la vibración de nuestra energía se baje y peor, que se estanque. Al estar conectados de forma negativa a la tierra, nos sentimos pesados y como si nos arrastráramos sin poder actuar o reaccionar, permitiendo a nuestra mente poder imaginar y programar cosas mas negativas o peores de las que ya estamos viviendo.
Cuando meditamos o silenciamos la mente, hay pequeños espacios de luz donde podemos recibir dirección y apoyo espiritual de nuestro Ser Interior y nuestra intuición. Entre mas silencio logremos producir dentro de nosotros, tendremos mas conexión a la intuición, la conciencia Divina, y el conocimiento Universal. El tener los tres beneficios anteriores ayuda para que veamos los problemas como menos problemas y mas como oportunidades de crecimiento, y esto aumenta nuestra vibración y potencial de resolver lo que nos afecta para atraer cosas nuevas a nuestra vida.
Es difícil deshacerse de los pensamientos negativos que vienen como olas cuando tratamos de mantenernos en el silencio. La práctica lo hará mas fácil.
Un ejercicio que funciona muy bien es imaginar que cada pensamiento que va llegando a tu mente es una bolita de algodón, y que llega desde arriba para meterse a tu cabeza, pero por su ligereza rebota hacia los lados. Pon un rio al lado tuyo que servirá para llevarse lejos las bolitas de algodón que no pudieron entrar en tu cabeza.
Otro ejercicio muy lindo es imaginar que los pensamientos llegan a tu cabeza como una pluma, y va flotando de lado a lado con mucha suavidad hasta que suavemente se vuela a un lado y desaparece. Cada vez que venga un pensamiento repite la acción suave de la pluma que flota y desaparece. Este ejercicio lo inventó Caoline A. Shearer.
Dina Sasson.
